martes, 24 de abril de 2007

EL OZAMA

 Hiere el alma el grito de auxilio que aflora en la mirada fría y gris de tu cuerpo serpentino que yace tendido en este cause de riberas mal olientes, entregado como quien lleva en su seno una enfermedad Terminal, afligido y triste herido de muerte. Las lilas tienden de verde el lecho, queriendo proteger tu fuente dadora de vida de los depredadores humano.